Lunes, 26 de Mayo del 2025
GRUPO GLORIA Y EMPRESA CHINA INTERESADAS EN CONCESIÓN DE
OLMOS
El Estado no tiene intención de prorrogar el contrato de
la Concesionaria Trasvase Olmos (CTO), responsable de la operación y
mantenimiento del proyecto de irrigación Olmos (Lambayeque) que vence el
próximo 24 de septiembre.
Antes de su accidentada salida del Gabinete Boluarte, el
entonces premier Gustavo Adrianzén adelantó que el Estado no tenía intención de
prorrogar el contrato de la Concesionaria Trasvase Olmos (Lambayeque).
Dicho contrato vence el próximo 25 de septiembre. La CTO
es subsidiaria de Novonor Participación e Inversiones (NPI), parte del Grupo
Novonor (anteriormente Odebrecht). En un primer intento, la empresa presentó
una propuesta de adenda al concedente, el Gobierno Regional de Lambayeque, para
extender la concesión por 10 años. Ante la negativa del Estado, hay una
contrapropuesta en marcha, pero también nuevos interesados.
Y aunque hasta ahora no se ha recibido ninguna carta de
intención firme para sumir la concesión de la operación y mantenimiento del
proyecto de irrigación Olmos, dos empresas han solicitado información para
evaluar posible participación.
Según informó el gobernador regional de Lambayeque y
concedente del Proyecto de Irrigación Olmos, Jorge Pérez Flores, una de ellas
es de origen chino, mientras que la otra empresa es una empresa local: se trata
de Cementos del Sur (Calcesur), perteneciente al Grupo Gloria.
“Ambas compañías enviaron un documento solicitando
información con el objetivo de analizar la posibilidad de participar en un
futuro proceso de licitación”, señaló la autoridad.
En este contexto, Pérez Flores consideró que los 18 meses
de extensión del contrato “deben ser óptimos” para llevar a cabo el proceso de
licitación internacional y lograr que una nueva empresa asuma la gestión del
proyecto.
“Estamos abiertos a que cualquier empresa especializada
en el sector se interese en este proyecto, que no solo es vital para la
irrigación, sino que además involucra caso US$ 1,000 millones en
exportaciones”, subrayó.
El nuevo concesionario, aclaró el gobernador, será
responsable del recrecimiento de la presa Limón. Actualmente, la presa tiene
una altura de 45mentros, pero la intención es que en esta nueva concesión se
eleve a 85 metros, aumentando su capacidad de almacenamiento de 30 millones a
198 millones de m3.
“Con esta ampliación, se espera reducir la crisis hídrica
y, junto con el dragado, disminuir el impacto del déficit de agua que ha
afectado al proyecto debido a la sedimentación y problemas ambientales. Para
dar una idea, por esta crisis hídrica las empresas agroindustriales dejaron de
recibir agua durante cerca de cinco días, lo que generó penalidades por
aproximadamente S/4 millones (sobre CTO), que fue cobrada por mi gestión”,
explicó.
Parablemente, el nuevo concesionario también deberá
encargarse del aseguramiento del talud y del tratamiento integral del río
Huancabamba.
LO QUE ESPERA NOVONOR
En diálogo con Gestión, Alfonso Pinillos, gerente general
de la Concesionaria Trasvase Olmos (CTO) explicó que, ante la negativa del
Estado, la empresa presentó una nueva propuesta al concedente del Proyecto, el
Gobierno Regional de Lambayeque. Esta propuesta busca modificar la adenda
presentada originalmente en agosto de 2023.
“Hemos reformulado la propuesta de la adenda, ya no se
trata de una prórroga de 10 años. Por el contrario, hemos presentado una
modificación contractual en la que planteamos ponernos a disposición de lo que
el Estado peruano decida. La nueva propuesta contempla una ampliación del plazo
mínima (del contrato de concesión), de entre ocho a doce meses, mientras el
Estado contrata a un nuevo operador, no para una gestión temporal, sino con
miras a ejecutar el recrecimiento de la presa Limón”, indicó el ejecutivo.
Asimismo,
consideró que el proceso para otorgar una concesión bajo el esquema de
Asociación Público – Privada (APP), que estaría a cargo de ProInversión, toma
varios meses.
“El problema que
enfrentamos actualmente es que, al menos desde nuestra perspectiva, no
conocemos a un tercero –ya sea el Estado, a través del PEOT, o un operador
privado- que cuente hoy con las capacidades necesarias para garantizar la
continuidad del proyecto sin poner en riesgo todo lo que se ha logrado”,
afirmó.
¿Qué implicaría
la modificación contractual? Como parte de la propuesta de extensión temporal
del contrato, CTO contempla la contratación de una empresa especializada en
dragado para retirar el sedimento acumulado en la presa Limón. Esta
intervención es vital, ya que la capacidad de almacenamiento del embalse se ha
visto reducida ampliamente debido al arrastre de sedimentos y eventos
climáticos extremos ocurridos en los últimos años, incluidos El Niño de 2015,
el Niño costero de 2017 y el ciclón Yaku en 2023.
EL PROBLEMA CON
LA PRESA LIMÓN
En cuanto al
mantenimiento de la presa Limón, la empresa sostiene que ha cumplido con lo
estipulado en el contrato de concesión, que exige el control de sedimentos
mediante compuertas de descarga de fondo. “El diseño establece que se debe
evacuar el 50% del sedimento entrante, y eso es lo que hemos hecho desde el
2012. Hemos operado conforme a los manuales técnicos”, afirmó. No obstante,
ante el ingreso de un volumen significativamente mayor de sedimentos, el
control regular ya no es suficiente. Por ello, la propuesta de prórroga
temporal, incluye la ejecución de dragados como medida temporal, aunque la
solución de fondo es el recrecimiento de la presa Limón. Este proyecto de
ampliación estructural, que podría demandar una inversión estimada de US$ 250
millones, tomaría entre 4 y 5 años, de acuerdo a Pinillos, considerando los
procesos de licitación y construcción.