Viernes, 31 de Mayo del 2024
51 AÑOS DE LA APARICIÓN DE LA VIRGEN MARIA EN EL ALGARROBITO DE NITAPE.
Este viernes 31 de mayo se cumplen 51 años de la visión
que tuvo la entonces niña Teodora Gonzáles Torres, cuando vio por primera vez a
la Virgen en las ramas de un algarrobo cuando retornaba a su domicilio tras
salir de clases en una escuela de la ciudad de Olmos.
Este suceso ocurrió en el sector conocido como Nitape,
donde hoy se levanta un santuario en conmemoración a la aparición de la madre
de cristo, donde muchos católicos llegan para elevar sus oraciones.
Era el atardecer del 31 de mayo de 1973, en que las
hermanas Gonzáles Torres caminaban hacia su casa luego de asistir a estudiar en
la escuela 10172, hoy IE María Isabel Núñez de Silva.
Una de ellas, la pequeña Teodora escuchó de pronto una
voz que la llamaba por su nombre una y otra vez.
Miró a todos lados y no vio a nadie; pero al observar la
copa del árbol de algarrobo que estaba a un costado del camino, vio como una
silueta se balanceaba de un lado a otro.
Era una mujer vestida de blanco, con velo celeste sobre
su cabeza y tenía entre sus manos un librito y un rosario: Era la Virgen María.
No fue una, sino varias las ocasiones que la niña Teodora
vio a la virgen e incluso conversaban días tras días y se dice que muchos
secretos le fueron revelados, que tal vez algún día los conoceremos.
En una de sus conversaciones la virgen le dijo que el 18
de julio de ese año, iba a dar una prueba de su presencia a todos los olmanos
creyentes.
El párroco de entonces Antonio Vigil Chávez, como
representante de la iglesia católica había pedido una prueba para comprobar la
presencia de la Virgen y esta se dio en la citada fecha.
Los asistentes vieron sorprendidos como el sol daba
vueltas a gran velocidad, similar a un disco expidiendo chispas, reflejándose
en el algarrobo rayos de diferentes colores.
Ese 18 de julio, llovió al mediodía y se escuchó un
estruendo en el cielo: Esa fue la prueba que muchos esperaban.
El algarrobito situado en Nitape, donde apareció la Virgen María.
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